TAILANDIA Internacionales - 

Tailandia: Orden de arresto para presunto autor de atentado

La policía tailandesa emitió el miércoles una orden de arresto contra un "extranjero no identificado" que se ve en un video captado por cámaras de seguridad dejando una mochila minutos antes de que estallara una bomba en un templo en Bangkok hace dos días. Las autoridades admiten que desconocen la nacionalidad del individuo.

La policía también difundió el miércoles un retrato robot del sospechoso y ofrece una recompensa de 1 millón de baths (28.000 dólares) por información que lleve a su arresto. Pero aparte del retrato aproximado, las autoridades tienen pocas pistas sólidas: no conocen el nombre del agresor, de dónde es o si permanece en el país.

En conferencia de prensa, el jefe nacional de policía Somyot Poompanmoung expresó incertidumbre sobre el origen del sospechoso. Dijo que el hombre "parece extranjero" pero "pudo disfrazarse y usar una nariz falsa" para ocultar su identidad.

El santuario Erawan —un lugar de oración al aire libre— reabrió al público dos días después del atentado, considerado como el peor en la historia del país. Nadie ha reclamado la autoría de la explosión que dejó 20 muertos y más de 120 heridos, ocurrida en una de las esquinas de mayor tránsito de la capital en plena hora pico.

Un borroso video de seguridad muestra a un hombre de camisa amarrilla y pantaloncillos cortos poniéndose en cuclillas y dejando una mochila negra ahí mientras él se aleja caminando. El registro de la imagen muestra que se fue del templo 15 minutos antes de la explosión, la cual ocurrió poco antes de las 7 de la noche.

"Si los ciudadanos o alguien puede darnos información o pistas que lleven al arresto de este hombre, he establecido una recompensa de un millón de bahts", dijo Somyot. En imágenes grabadas por cámaras de seguridad se ven dos posibles cómplices que también están considerados como sospechosos, dijo el teniente general Prawut Thavornsiri, portavoz de la policía.

"Él no actuó solo. Es una red", dijo Somyot.

La imagen que difundieron las autoridades también se basó en una descripción proporcionada por el conductor de un mototaxi que se cree le llevó la noche del atentado.

El retrato muestra un hombre joven con gafas y cabello oscuro más corto por los lados. La orden de arresto lo describe como alto, con nariz afilada y labios gruesos. Enfrenta seis cargos que incluyen conspiración para cometer asesinato y utilizar una bomba que causó varios muertos y heridos.

El ataque hizo pensar en las condiciones de seguridad en una ciudad que atrae a millones de turistas.

El primer ministro Prayuth Chan-ocha está "preocupado por la seguridad de la gente y los turistas en Tailandia", informo el jefe de policía el miércoles antes de acudir a una reunión de tres horas con mandos de la policía.

Chan-ocha dijo que se trata del "peor incidente que ha ocurrido jamás en Tailandia", y prometió encontrar a los responsables.

El santuario de Erawan es un lugar venerado por los tailandeses y los turistas más allá de la religión. Está dedicado al dios hindú Brahma, pero resulta muy popular también entre los budistas tailandeses y los turistas chinos.

Aunque Tailandia es de mayoría budista, el hinduismo tiene influencia en sus prácticas religiosas y su idioma. La ubicación del santuario contribuye a su popularidad, ya que ofrece un lugar de oración al aire libre en medio de los relucientes centros comerciales y hoteles de cinco estrellas de la capital.

El miércoles por la mañana acudió mucha gente para orar de rodillas, encender incienso y colocar flores en el lugar del atentado.

Uno de los acudieron fue el oficinista Nuansupha Sarunsikarin, que expresó su consternación y tristeza por el suceso. Las autoridades admitieron que el ataque las tomó por sorpresa y que el motivo no está claro.

"Estoy deprimido por esas personas inocentes que tuvieron que pagar por algo en lo que no tienen que ver y ahora no tienen oportunidad de vivir sus vidas", dijo Nuansupha.

Bangkok se estremeció nuevamente el martes, cuando otra bomba de fabricación casera detonó en Sathorn Pier, un sitio con alta afluencia turística, aunque nadie resultó herido.