La administración del presidente estadounidense Donald Trump volvió a autorizar las trampas venenosas conocidas como "bombas de cianuro" para matar zorros silvestres, coyotes y perros salvajes a pesar de la abrumadora oposición de los grupos de conservación.
Los dispositivos, conocidos como M-44, que se implantan en el suelo y se asemejan a los rociadores de césped, usan un eyector con resorte para liberar cianuro de sodio cuando un animal atraído por un cebo jala un soporte del compartimiento de la cápsula.
El gobierno detuvo el uso de los dispositivos el año pasado después de que uno de ellos fue responsable de herir a un niño y matar a su perro en Idaho.
La familia también ha presentado una demanda contra el gobierno federal.
La decisión de restablecer su uso indignó a grupos ambientalistas que inundaron la Agencia de Protección Ambiental con más de 20.000 cartas de protesta.
"Son increíblemente peligrosos para las personas, sus mascotas y la vida silvestre en peligro de extinción, son demasiado peligrosos para ser utilizados", dijo a la AFP Collette Adkins, directora de conservación de carnívoros del Centro para la Diversidad Biológica.
"La industria ganadera lo quiere", dijo, y agregó que los grupos de la industria agrícola enviaron unos 10 comentarios a favor de volver a autorizar los M-44 a la EPA.
Según datos del gobierno, los M-44 mataron a 6.579 animales en 2018, incluidos más de 200 animales "no objetivo", incluidos mapaches, zorrillos y un oso.
Adkins dijo que su organización continuaría presionando para prohibiciones a nivel estatal, la última de las cuales fue aprobada por Oregon en mayo.
FUENTE: AFP