El arzobispo Metropolitano, monseñor José Domingo Ulloa, presidió este Jueves Santo la Misa Crismal en la Catedral Metropolitana, resaltando el compromiso, el don del misterio sacerdotal y la importancia de la fraternidad entre los sacerdotes de la Arquidiócesis de Panamá.
Durante la misa, Ulloa, advirtió a los feligreses sobre algunos "estafadores" que están pidiendo dinero a nombre de la Iglesia, reveló que “estamos bajo la pista y ¡tienen que pagar!”. Agregó “si quieren hacer negocio, que trabajen.
¡No caigan en ese engaño!”, dijo el arzobispo Metropolitano, en celebración e invitó a los feligreses a no dejarse “engañar” por estas personas y a “tener malicia”.
Al final de la homilía, informó del traslado de algunos curas a distintas parroquias y entregó reconocimientos a los sacerdotes diocesanos que cumplieron más de 25 años de ministerio e igual hizo con las religiosas que tienen más de 50 a 60 años al servicio de la vida consagrada.
En esta misa Crismal el Obispo consagra el Santo Crisma y bendice los óleos. Con este Santo Crisma son ungidos los nuevos bautizados y son signados los que reciben la confirmación con el óleo de los catecúmenos y así se preparan y disponen los que van a recibir el Bautismo.
La iniciativa fue iniciada por el Beato Papa Pablo VII quien quiso dar un tono sacerdotal como manifestación de la comunión existente entre el Obispo y sus presbíteros en el ministerio de Cristo. A esto se añadió en 1969 la renovación de las promesas sacerdotales.
FUENTE: Odalis Núñez