Un grupo de exfuncionarios despedidos del Municipio de Arraiján ha solicitado una cortesía de sala en el Consejo Municipal para exigir una disculpa pública de la alcaldesa Stefany Peñalba. Los exfuncionarios se sienten insultados por ser calificados como "botellas" por la alcaldesa y también demandan el pago inmediato de sus prestaciones laborales pendientes.
La situación se complicó aún más cuando la representante de Vista Alegre, quien también participó en la solicitud de cortesía de sala, exigió respeto tras ser aludida por la alcaldesa. Peñalba había insinuado que la molestia de la representante se debía a la destitución de su supuesto esposo, lo que fue calificado como un comentario inapropiado y fuera de lugar por la representante.