Este 10 de noviembre, Panamá conmemora los 204 años del Primer Grito de Independencia de 1821, un acontecimiento que marcó el inicio del proceso emancipador del istmo frente al dominio español. El histórico suceso tuvo lugar en La Villa de Los Santos, donde un grupo de patriotas, cansados de los abusos coloniales y del irrespeto a la población civil, protagonizó un levantamiento contra las autoridades de la corona.
Liderados por Segundo De Villareal y respaldados por el pueblo santeño, los insurrectos tomaron el control del poblado y firmaron el Acta de Independencia, que inspiró la liberación de otras comunidades como Penonomé, Natá de los Caballeros, Santiago de Veraguas y Portobelo. Este movimiento se considera el punto de partida de la independencia definitiva de Panamá, lograda el 28 de noviembre de 1821.
Rufina Alfaro: la heroína del 10 de noviembre
Entre las figuras más emblemáticas de esta gesta destaca Rufina Alfaro, una mujer cuya valentía es símbolo del espíritu independentista panameño.
Aunque su existencia no ha sido completamente verificada, la leyenda de Alfaro difundida desde la década de 1940 representa el coraje de las mujeres del interior que contribuyeron a la causa libertaria. Su historia, más allá del mito, se ha convertido en parte del patrimonio cultural de la nación, reflejando los valores de libertad, dignidad y orgullo nacional.
Una fecha para reflexionar sobre la identidad nacional
El 10 de noviembre no solo evoca la memoria de los héroes que iniciaron la independencia, sino que invita a reflexionar sobre la identidad panameña y la importancia de conocer la historia del país.
En Los Santos, la celebración mantiene un fuerte carácter autóctono, con desfiles, actos cívicos y presentaciones folclóricas que reafirman el sentimiento patriótico y la herencia cultural del pueblo panameño.




