Un equipo internacional de científicos, con la participación de la Universidad de Maryland (EE.UU.), la NASA y el Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), ha revelado detalles inéditos de un agujero negro supermasivo en una galaxia ubicada a 270 millones de años luz, en la constelación de Draco. Este agujero negro, con una masa equivalente a 1.4 millones de soles, ha mostrado fenómenos nunca antes registrados, como la emisión de un chorro de plasma y rápidas fluctuaciones de rayos X.
Las imágenes obtenidas entre febrero y mayo de 2024 con el Very Long Baseline Array (VLBA) del Observatorio Radioastronómico Nacional revelaron la formación de chorros de plasma, extendiéndose desde el agujero negro a velocidades cercanas a un tercio de la velocidad de la luz. “La formación de un chorro nunca se había observado en tiempo real”, destacó Meyer.
Fluctuaciones de rayos X y misterio en el horizonte
Observaciones realizadas con el satélite XMM-Newton revelaron rápidas oscilaciones en los rayos X entre julio de 2022 y marzo de 2024, con periodos que disminuyeron de 18 a 7 minutos antes de estabilizarse. Megan Masterson, del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), sugirió que estos cambios podrían estar vinculados a la presencia de una enana blanca cercana al horizonte de sucesos del agujero negro, que estaría perdiendo parte de su materia.
El Gran Telescopio Canarias (GTC), situado en el Observatorio del Roque de los Muchachos, desempeñó un rol crucial en el seguimiento de este fenómeno. José Acosta Pulido, investigador del IAC, resaltó que la emisión visible de la galaxia permaneció estable durante el periodo 2022-2024, a pesar de los eventos de alta energía detectados.
Este hallazgo abre nuevas perspectivas para entender los procesos que ocurren en las inmediaciones de los agujeros negros supermasivos y pone en evidencia la importancia de colaboraciones internacionales y tecnología de punta en la exploración del universo. /EFE
FUENTE: Redacción EFE