El Banco de Inglaterra intensificó el martes sus esfuerzos urgentes por reducir la inestabilidad en los mercados financieros causada por el plan del gobierno de recortar los impuestos, afirmando que las fluctuaciones en los precios de los bonos presentan “un riesgo material” a la estabilidad fiscal del país.
Las compras ascenderán a un total de 10.000 millones de libras (11.000 millones de dólares) al día, divididas en partes iguales para cada tipo de bono, y el programa cesará el viernes como estaba programado, indicó la institución en un comunicado.
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El banco aumentó el programa luego que los rendimientos volvieron a dispararse el lunes, regresando a niveles alcanzados inmediatamente después de que el gobierno anunció los recortes impositivos sin decir cómo pagará por ellos. Ello provocó temores de un aumento de la deuda pública, hundiendo a la libra a pisos históricos y poniendo en peligro los programas de pensiones.
El plan de compra de bonos busca responder a la situación creada en el llamado mercado secundario, donde los inversionistas canjean bonos previamente comprados al gobierno. Los precios de los bonos tienden a bajar a medida que aumentan las dudas de que el prestamista podrá pagar la deuda. Ello provoca un aumento del rendimiento, ya que los inversionistas reciben el mismo interés que una inversión más pequeña.
Los inversionistas temen que el plan del gobierno elevará la deuda e inflación, que ya ronda por el 9,9%, un nivel no visto en 40 años. El Instituto de Estudios Fiscales, una institución de estudios independiente, dijo el martes que la estabilización del mercado dependerá de “decisiones difíciles” en cuanto a recortes de gastos y aumentos de impuestos.
FUENTE: Associated Press