El reto impuesto por los famosos, la Zambita y Andrés Poveda, fue de temer ya que el chef Armando tuvo que maniobrar una marioneta humana que no daba "ni pa' tras ni pa' lante".
Al principio pensaba que el reto iba a ser aún más complicado porque al ver a la Zambita y a Poveda se imaginó que cocinarían un plato típico.
"Hasta aquí llegue si era algo típico"
Al final, terminó hasta ayudando al equipo de los famosos y a pesar de eso, les ganó en sabor y textura. Definitivamente el chef Armando es muy servicial pero sobre todo astuto.