La vida privada del cantante Chris Brown no ha pasado precisamente desapercibida desde su salto a la fama hace ya varios años, aunque es cierto que el rapero también supo ingeniárselas para mantener en secreto -al menos durante un tiempo- una de sus facetas más sorprendentes: la de padre de una niña de dos años llamada Royalty.
Sin embargo, desde que Chris confirmara su paternidad en abril del año pasado, sus continuos desencuentros con la madre de la pequeña han generado un sinfín de titulares, normalmente ligados al hecho de que Nia Guzman -de origen mexicano y puertorriqueño- no está nada contenta con las labores como padre del intérprete.
"El mundo no lo supo hasta hace un año, pero Chris siempre fue consciente de que tenía una hija, solo que no estaba preparado para enfrentarse a la situación. Ha sido toda una experiencia. No puedo decir nada positivo, en absoluto, nada positivo", confiesa Nia a la revista Latina.
Una de sus discusiones más sonadas fue la que mantuvieron a través de Instagram cuando la madre publicó una foto de Royalty con un tutú y Chris la acusó de "sexualizar" a su hija vistiéndola como una adolescente.
"Para mí es una locura que un padre acepte vestir a una niña como si tuviese 16 años. A mí no me parece bien. ¡Tiene dos años!", publicaba el rapero para expresar su enfado. "Si alguien cree que está mal que una niña aparezca vestida para su clase de baile con un tutú... ¡Debería irse a rezar! Namaste", le contestaba la modelo que ahora asegura que el cantante ya había visto a la niña con esa ropa y que nunca había tenido problema con ello. "Él ya había visto vídeos de ella de camino a sus clases de ballet. Hacer ese comentario en la red fue una locura. Tengo teléfono, podría haberme llamado. Intento una y otra vez que la custodia compartida funcione para las dos partes. Siempre la visto así para sus clases de baile. Era un momento divertido porque se quedó mirándome muy enfadada, era el momento de irnos y ella no quería".
A pesar de la batalla pública que mantienen los padres, Nia niega que fuese recientemente al juzgado a intentar reducir las horas de visitas de Chris, sino que únicamente pretendía que hubiera una niñera en todo momento cuando le tocaba a él pasar tiempo con su hija.
"No fui al juzgado para que limitasen su tiempo, para nada. Nunca he querido eso. Los días de visita los acordamos. Yo estuve de acuerdo. Es lo que yo quería para él. No hubo orden del juez ni nada parecido, fue todo acordado. Y ahora yo quería que siempre hubiese una niñera durante las visitas. Nunca quise reducir su tiempo o quitárselo. Es sentido común. Él sabe que no puede con todo solo, Royalty tiene dos años y da mucho trabajo", aclara en la entrevista.
FUENTE: Showbiz