El rapero French Montana podría tener que acudir nuevamente a los juzgados a cuenta del carácter agresivo de su pastor alemán Zane y, de forma más concreta, por el presunto ataque que este habría perpetrado contra un vecino del intérprete llamado Daniel Bañuelos en el verano de 2017.
La víctima ha decidido emprender ahora acciones legales contra el artista en busca de una elevada indemnización con la que tratar de reparar las secuelas "físicas y psicológicas" derivadas de la supuesta agresión.
Según los documentos legales a los que ha tenido acceso el portal de noticias The Blast, el demandante acusa al que fuera novio de Khloé Kardashian de haber actuado de forma negligente al tener a su mascota sin bozal o correa en todo momento, independientemente -asegura Bañuelos- de que fuera plenamente consciente de la naturaleza violenta del animal.
Este comportamiento habría derivado, en consecuencia, en un sinfín de mordiscos que habrían dejado al afectado con "cicatrices de por vida" y sin posibilidad de trabajar a lo largo de una larga temporada.
Todavía no ha trascendido la cantidad exacta que reclama Bañuelos al astro del hip hop en relación con estas lesiones, las cuales han sido descritas por el demandante como "permanentes y de severa gravedad, corporales, mentales y emocionales", pero las fuentes contactadas por el citado medio aseguran que podría rondar el medio millón de dólares.
Esta no es la primera vez que French Montana tiene que responder ante la justicia por la falta de medidas preventivas ligadas a la conducta del can. De hecho, el rapero recibió una primera denuncia en mayo de 2017 después de que Zane consiguiera escapar de su control y acabara atacando a uno de sus empleados, Juan Lomeli, el encargado de limpiar la piscina de la mansión que el intérprete tiene en Calabasas (California).
FUENTE: Showbiz