WASHINGTON (AFP). La Casa Blanca condenó firmemente este viernes el ataque contra el palacio presidencial en Yemen, que dejó herido al presidente yemení Alí Abdalá Saleh.
"Estados Unidos condena en los términos más duros los actos de violencia sin sentido en Yemen, incluido el ataque contra el palacio presidencial en Saná", indicó un comunicado de la Casa Blanca.
El presidente yemení Alí Abdalá Saleh, y su primer ministro, Alí Mohamed Mujawar, resultaron heridos el viernes por disparos contra el palacio presidencial en Saná, mientras las tropas leales bombardeaban la residencia de un dignatario tribal hostil al gobierno.
Después de un breve momento de calma en la madrugada, la capital yemení fue escenario de los más violentos enfrentamientos desde la crisis provocada por el rechazo de Saleh a firmar el acuerdo de transición política propuesto por las monarquías del Golfo.
Al menos tres guardias de la mezquita presidencial murieron y el imán resultó herido por los obuses que cayeron durante la oración semanal del viernes, según un comunicado oficial.
"Levemente alcanzado detrás de la cabeza" durante el ataque, el presidente Saleh "está bien" y ofrecerá una conferencia de prensa en "las próximas horas", anunciaron el gobierno y la televisión estatal.