Un hombre fue detenido este viernes tras haber empotrado su vehículo, cargado con dos bombonas de gas y una importante cantidad de explosivos que no hizo estallar, contra la sede madrileña del Partido Popular (PP), en el poder en España, informó la policía.
"A las 07H00 (05H00 GMT), un hombre ha estrellado su propio coche contra la fachada de la sede del PP de Madrid", declaró a la AFP una portavoz de la policía, precisando que no había "nadie herido".
A bordo del automóvil llevaba un artefacto explosivo de fabricación casera consistente en 5,8 kilos de nitrato amónico mezclado con combustible y dos bombonas de butano, explicó posteriormente otra portavoz.
La bomba "tenía dos modos de activación: contaba por un lado con un temporizador programado a 90 minutos pero que nunca llegó a activar, y por otro un iniciador fabricado con cerillas que era necesario prender para que funcionase", precisó.
"Era una carga explosiva importante" que de haber estallado "habría podido causar daños graves a la estructura de la planta baja y tal vez haber afectado a los edificios aledaños", en pleno centro de la capital, agregó.
La policía acordonó un amplio perímetro alrededor del lugar, muy cercana a la céntrica Plaza de Colón, en el paseo de la Castellana, la principal arteria de la ciudad, causando grandes atascos en plena hora punta, cuando muchos madrileños acuden a sus trabajos. El suceso obligó también a cerrar varias estaciones de metro cercanas.
El jefe del gobierno español, el conservador Mariano Rajoy, visitó la sede del partido que preside una vez detenido el hombre y retirado el artefacto explosivo. Y la número dos del ejecutivo, Soraya Sáenz de Santamaría, también del PP, se congratuló "de que no haya habido ningún daño personal", en rueda de prensa.
Todo el día reinó la confusión sobre la identidad y los motivos del atacante.
En un primer momento, el hombre, identificado como Daniel Pérez Berlanga, de 37 años, según fuentes de la investigacion, dijo a los agentes ser "un empresario que había perdido todas sus propiedades".
Posteriormente, la investigación concluyó que se trata de un desempleado de la provincia de Teruel, a unos 220 km al este de Madrid, que nunca ha tenido ninguna empresa.
Durante el interrogatorio, el detenido afirmó que "su intención era atentar contra la clase política española, no contra un partido en concreto, sino con los políticos porque le habían buscado la ruina", afirmó en rueda de prensa por la tarde el jefe superior de policía de Madrid, Alfonso José Fernández Díez.
Aunque en un primer momento la policía evocó un posible problema psiquiátricos, posteriormente determinó "que no tiene una enfermedad mental diagnosticada y tratada", precisó una de las portavoces policiales.
Ahora "serán los forenses quienes tengan que determinar" si padece algún tipo de perturbación, explicó Sáenz de Santamaría.
A primera hora de la tarde, el tráfico había sido restablecido y la situación volvía a la normalidad.
FUENTE: AFP