La organización internacional Human Rights Watch denunció una “embestida” contra la independencia del Poder Judicial de Bolivia por parte del gobierno de Evo Morales y llamó a la Organización de Estados Americanos a intervenir.
La destitución “arbitraria” de cerca de un centenar de jueces desde 2017 “debilita seriamente la independencia judicial” y la “OEA debería convocar a una reunión de su Consejo Permanente para discutir la reforma judicial que está debilitando el Estado de derecho” en Bolivia, dijo HRW en su informe sobre el país dado a conocer el lunes en Nueva York.
La organización basó sus observaciones en las destituciones de jueces, sin causa aparente y sin que éstos hayan tenido la oportunidad de “impugnar antes de ser removidos”. Las últimas remociones tuvieron lugar en marzo.
Los cambios fueron ordenados por el Consejo de la Magistratura integrado por tres magistrados -dos de los cuales fueron exfuncionarios del gobierno de Morales, incluido su presidente- y son parte de una “reforma judicial” que lleva adelante una comisión de nueve miembros, cinco de los cuales “son partidarios de Morales o funcionarios gubernamentales que él designo”, dijo el informe.
“Si los bolivianos no tienen garantías de independencia judicial todos sus derechos pueden ser amenazados”, sostuvo José Miguel Vivanco, director para las Américas de la organización defensora de los derechos humanos.
Autoridades del Ejecutivo boliviano contactadas por The Associated Press el lunes han dicho que esperan conocer el informe antes de pronunciarse. En tanto, AP solicitó un comentario a la OEA sin obtenerlo de inmediato.
“Los jueces son mucho más vulnerables a las presiones que el gobierno pueda ejercer. HRW ha recibo denuncias creíbles de presiones por parte de altos funcionarios de gobierno para que los jueces procesen a opositores... Otro ejemplo de la vulnerabilidad del Poder Judicial es la insólita decisión del Tribunal Constitucional declarando que Evo Morales tiene un derecho humano a presentarse indefinidamente a las elecciones”, dijo Vivanco a AP.
Según la constitución puesta en vigencia por Morales en 2009, los altos cargos del Poder Judicial, entre ellos el Tribunal Supremo de Justicia, el Tribunal Constitucional y el Consejo de Magistratura, fueron elegidos por el voto ciudadano de una lista seleccionada por la Asamblea Legislativa en la que el gobierno controla los dos tercios.
La mayoría de los candidatos a esos cargos “habían trabajado para el gobierno de Morales”. “Mientras tienen lugar estas destituciones caprichosas, el presidente Morales se dedica a menospreciar la importancia de la independencia judicial”, agregó.
Bolivia es parte de tratados y convenciones sobre derechos humanos que exigen protección y respeto de la independencia judicial.
No es el primer informe crítico de HRW en contra de la gestión de Morales -en el poder desde 2006-. En las anteriores el mandatario les ha restado importancia y ha acusado a la organización de “defender los intereses del imperio” en alusión a Estados Unidos.
FUENTE: AP