China reportó el sábado la muerte de cerca de 60,000 personas con COVID-19 desde principios de diciembre tras las quejas de que el gobierno no publicaba datos sobre la situación de la pandemia en el país.
El reporte duplicaría con creces la cifra oficial de decesos por COVID-19 en China, elevándola a 10,775 frente a los 5,272 que había el 8 de enero.
El gobierno chino dejó de ofrecer datos sobre contagios y muertes por el coronavirus a principios de diciembre, después de levantar abruptamente sus estrictos controles pandémicos. La Organización Mundial de la Salud y otros gobiernos pidieron más información a Beijing ante el repunte de las infecciones.
FUENTE: Associated Press