Grupos ambientalistas británicos elogiaron el miércoles la decisión del gobierno conservador de abandonar su oposición a la instalación de granjas eólicas en tierra. Pero advirtieron que los beneficios se borrarán si el gobierno respalda los planes de abrir la primera mina de carbón en tres décadas.
El viento generó más de la cuarta parte de la electricidad británica en 2021. Pero desde 2015 el gobierno conservador se opone a instalar nuevas turbinas en tierra debido a la oposición local. La mayoría de las granjas eólicas británicas están en el mar.
Durante la campaña por el liderazgo del Partido Conservador a mediados de año, el ahora primer ministro Rishi Sunak prometió mantener la prohibición. Pero ante los llamados crecientes a un cambio por parte de los parlamentarios conservadores, el gobierno dijo el martes que permitiría las granjas eólicas allí donde una “consulta técnica” demostrara que tienen el apoyo de la población local.
“Las decisiones sobre sitios eólicos en tierra seguirán tomándose a nivel local porque conviene que las tomen los representantes locales que conocen sus zonas mejor y deben rendir cuentas democráticamente ante la población local”, dijo el gobierno en un comunicado.
FUENTE: Associated Press