Tennessee no ha cumplido con su propio protocolo de inyección letal desde que fue actualizado en 2018, lo que ha resultado en varias ejecuciones realizadas sin pruebas adecuadas, según una revisión independiente publicada el miércoles.
El reporte se publica meses después de que Lee suspendiera en mayo todas las ejecuciones después de reconocer que el estado no logró garantizar que sus medicamentos fueron probados adecuadamente. El descuido provocó que en abril Lee suspendiera abruptamente la ejecución de Oscar Smith una hora antes de que iba a ser ejecutado.
El gobierno de Lee ha estado revisando el informe desde la semana pasada, negando su publicación hasta que el gobernador y sus principales asesores tuvieran tiempo de examinar cientos de páginas que detallan el proceso del corredor de la muerte del estado.
Lee designó al exfiscal federal Ed Stanton para revisar las circunstancias que llevaron a la falla y emitiera su reporte. Stanton recibió la tarea de revisar la claridad del manual de inyección letal del estado y analizar al personal del Departamento de Prisiones de Tennessee.
Entre los varios hallazgos descritos en el informe, el equipo de Stanton reprendió a altos líderes del Departamento de Prisiones por ver el “proceso de inyección letal a través de un lente estrecho, orientado en resultados” y afirmó que la agencia no proporcionó al personal “la dirección necesaria y consejo necesario para garantizar que el protocolo de inyección letal de Tennessee fuera riguroso, consistente y seguido”.
Lee dijo el miércoles que planea hacer cambios en el liderazgo del departamento y contratar a un comisionado permanente en enero para reemplazar al interino. Los nuevos líderes, comentó, cambiarán el protocolo de inyección letal en coordinación con las oficinas del gobernador y la fiscalía general, y revisará y cambiará la capacitación del departamento.
Tennessee usa una serie de tres medicamentos para matar a los reclusos: midazolam, un sedante para que pierda conciencia el recluso; bromuro de vecuronio, para paralizar al recluso; y cloruro de potasio, para detener el corazón.
FUENTE: Associated Press