Tras cinco años de silencio, la banda mexicana Reik regresa sin miedo a un panorama musical marcado por el dominio del reguetón y los ritmos urbanos, pues, afirman, su propuesta es única y "diferente" del resto de un pop latino en horas bajas.
"Si ahora el género urbano es lo de hoy, entonces de pronto hay una carencia de oferta de buen pop en el mercado, por lo que nosotros somos cada vez más únicos", dijo en entrevista con Efe en Miami (EE.UU.) la voz principal del grupo, Jesús Navarro.
Los mexicanos, quienes se sienten "afortunados" por tener un espacio en el gusto del público tras doce años de carrera, consideran que en la música hay "etapas" y que, a pesar de que ahora no es el "momento" para la música pop, sigue habiendo un público "gigantesco" que apoya este género.
Para mantener su estatus y demostrar su autenticidad, el grupo no duda en ser "innovador" a la hora de experimentar, como en su último sencillo, "Ya me enteré", en el que muestran su sonido de siempre pero "engrandecido, corregido y aumentado".
"Creo, de alguna manera, por las referencias que tengamos, por haber crecido con un rollo bicultural, por ser fronterizos, no sé exactamente la razón, pero sí creo que siempre hemos sonado diferentes al resto del pop latino", opinó Navarro.
Este sencillo, que forma parte de su nuevo disco, que saldrá a la venta el próximo 17 de junio bajo el título de "Des/Amor", cuenta con una versión junto al reguetonero estadounidense Nicky Jam, con la cual pretenden llegar a seguidores de los ritmos urbanos.
"Se vuelve algo interesante cuando llegas a un público al que probablemente no hubieras llegado si no hubiese sido a través de alguien o a través de cierta experiencia", señaló Gilberto "Bibi" Marín.
El guitarrista del grupo consideró que esta colaboración les puede dar un "empujoncito" en su regreso musical tras cinco años de silencio.
El tercer integrante de la agrupación, Julio Ramírez, explicó que en este disco convergen canciones que respetan los orígenes de la banda, pero en el que también experimentan con el folk, el reggae y los ritmos urbanos.
"Está padre, porque darle variedad a la gente es importante", afirmó Ramírez. "El hecho de ser poperos nos permite viajar por todos estos diferentes estilos y acentos".
Este trío, que cuenta con éxitos como "Mi pecado" o "Con la cara en alto", apuesta por una "filosofía" en la que el carácter de cada uno de ellos influye a la hora de interpretar y crear sonidos y ritmos.
Se refieren a la personalidad de Navarro a la hora de cantar y componer, el permanente intento de Bibi de introducir alguna línea que suene "bluserona" sin perder el contexto pop y la "intensidad" de que Ramírez aporta a la agrupación "en todos los sentidos de la palabra".
Todo ello ha permitido al grupo originario de Baja California (México) ganar un premio MTV como Mejor Grupo Pop en 2009, así como un Grammy Latino con su disco "Un Día Más", ese mismo año, entre otros galardones.
A la pregunta de cuál querrían que fuera su próxima estatuilla, aseguraron que los premios suponen apenas un extra, pues lo importante es el reconocimiento del público.
"Lo hemos dicho cuando hemos ganado y cuando no: los premios son como la cerecita en el pastel y está increíble subir al escenario y aceptar un galardón, pero el premio real es tener conciertos llenos y una gira larga y exitosa", apuntó el vocalista.
Y es que los mexicanos han logrado completar el aforo del Auditorio Nacional de Ciudad de México en cinco ocasiones con su gira "Tour Peligro", con la que recorrieron su país natal, América Latina, Estados Unidos y les llevó tan lejos como a Corea del Sur.