Más de 40 años han pasado desde que llegó el coyote a Panamá, según registros del Ministerio de Ambiente (MiAmbiente).
En los últimos años los reportes sobre presencia de coyotes han aumentado en las zonas agrícolas y ganaderas del país, y esto se ha reflejado en estudios recientes del 2019, donde se ha evidenciado la expansión de los coyotes.
Esto se debe a que se crea un ambiente o nicho adecuado para esta especie, que requiere de estos alimentos.
De acuerdo con el técnico de la Dirección de Áreas protegidas y Biodiversidad de MiAmbiente, Alexander Montero, varias de las razones de la constante expansión de este animal son la deforestación y el desarrollo agrícola. Igualmente, influye la disminución de las poblaciones de los grandes depredadores como el puma y el jaguar.
MiAmbiente indicó que es necesario que el ser humano aprenda a convivir con estas especies tomando medidas necesarias.
En caso de encontrarse con un coyote es recomendable:
- Mantener la distancia.
- No acercarse al animal, mucho menos si tiene cría.
- No correr, pues el coyote lo puede confundir con una presa.
- Tratar de verse más grande e intimidante, subiendo a un lugar alto, agitando los brazos o haciendo sonidos fuertes, para que el animal se aleje.
- Si hay niños pequeños, cargarlos y mantenerlos seguros.
- Por ningún motivo se debe acercar al coyote, mucho menos si tiene cría.
Sobre los coyotes
- El coyote, cuyo nombre científico es Canis latrans, es un mamífero silvestre que tiene aspecto muy similar a un perro pastor alemán, hocico alargado, orejas erectas y cola caída y peluda.
- Se reproducen una vez al año, pero solo se reproducen los líderes de los grupos ( el macho alfa con su hembra).
- La época de reproducción se da entre los meses de diciembre y febrero, intensificándose más en el último mes.
- La camada por parto es de 4 a 8 cachorros, pero la supervivencia de los mismo es muy baja (entre el 50% al 70% de los individuos mueren antes del primer año).
- Su dieta incluye roedores, inclusive conejos y ñeques, insectos, culebras, lagartijas, vegetales y frutas. Sin embargo, pueden buscar comida entre basureros mal tapados y comida de mascotas.
- Prefieren cazar de noche pero se la ha visto con frecuencia al finalizar la tarde y al amanecer.
- Son muy ágiles y rápidos, pueden saltar hasta a una altura de dos metros y correr a una velocidad de 65 km por hora.