La aparición de lluvia y Sol en tiempo de verano, provocan que nuestros tejidos trabajen para controlar la temperatura y así evitar infecciones; de hecho, médicos han concluido que los cambios climáticos hacen que nuestra piel, vasos sanguíneos, pulmones e, incluso, los huesos, sufran, especialmente en los casos de personas más sensibles o con dolencias en sus articulaciones.
¿Qué pasa si me expongo tanto al calor?
Si una persona se expone por un tiempo prolongado al calor, la temperatura corporal se eleva por encima de los 38 grados, los efectos en la salud abarcan desde deshidratación, calambres, golpe de calor, síncope, arritmias, hasta el agravamiento de enfermedades previas y la muerte.
Efectos negativos por cambios de temperatura
Debido a la humedad que se registra en Panamá en el aire, prolonga el tiempo de virus respiratorios, incluido la Covid-19, Influenza y presencia de mosquitos transmisores del Dengue, Zika y Chikungunya.
Las secreciones permanecen más tiempo que cuando hay humedad y temperaturas elevadas y de esta manera, los patógenos se expanden rápidamente; por tal motivo es importante tener un buen sistema inmunológico que combata las infecciones virales a las que estamos más expuestos durante el invierno.
Profesionales de la Salud recomiendan cumplir los siguientes hábitos:
- Hidratación
- Buena alimentación
- Evitar la exposición prolongada a ambientes calientes o muy fríos
- Utilizar ropa adecuada durante cualquier temporada
- Dormir habitualmente
Un dato importante que los profesionales de la salud recomiendan es evitar lugares cerrados y mantener otras medidas como la utilización de mascarilla y la distancia de seguridad. Si tenemos un cuadro de tos, rinorrea u odinofagia, todas las medidas deben ser reforzadas en extremo para protegernos.