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EEUU alista golpes contra China por ciberataques

WASHINGTON (AP). La Casa Blanca se apresta el miércoles a revelar un nuevo reporte sobre indicios de que el gobierno chino está detrás del robo masivo de secretos comerciales y datos gubernamentales de Estados Unidos, y el gobierno de Barack Obama analiza qué multas y otras acciones comerciales aplicará contra Beijing y cualquier otro país culpable de ciberespionaje.

De acuerdo con funcionarios que conocen del plan, el nuevo reporte indica pasos iniciales y más enérgicos que dará Estados Unidos en respuesta a lo que las autoridades han descrito como una campaña incesante de robos cibernéticos vinculados con el gobierno chino.

Las autoridades hablaron con la condición de no ser identificadas porque no estaban autorizados a dar información al respecto.

El gobierno chino niega estar involucrado en los ataques cibernéticos citados en el análisis de una empresa de seguridad cibernética, Mandiant Corp., que detalla incursiones a más de 140 empresas. El miércoles, el ministerio de Defensa de China dijo que el informe tiene errores graves. La cancillería china dijo que el informe "no tiene fundamento".

La firma de seguridad cibernética, con sede en Virginia, reveló el lunes infinidad de detalles que vincularon a una unidad del Ejército chino en Shanghái con años de intrusiones y ataques cibernéticos contra empresas estadounidenses.

Después de analizar intrusiones a más de 140 empresas, la empresa Mandiant concluyó que los ataques pueden vincularse con la "Unidad 61398" del Ejército Popular de Liberación de China. Los expertos militares creen que la unidad es parte del comando cibernético del Ejército chino, que a su vez está bajo la autoridad directa del Estado Mayor, la versión china del Estado Mayor Conjunto de Estados Unidos.

Como tal, sus actividades probablemente tendrían la autorización de los niveles más altos del ejército chino.

El informe de Mandiant, que provee detalles sobre tres de los presuntos ciberintrusos y fotografías de uno de los edificios de la unidad militar china en Shanghai, hizo público lo que las autoridades estadounidenses han dicho menos públicamente durante años.

La divulgación del reporte aumentó la presión sobre la Casa Blanca para que tome una acción más enérgica contra los chinos frente a algo que los expertos dicen han sido años de espionaje sistemático.

"Si el gobierno chino volara aviones en nuestro espacio aéreo, nuestros aviones tendrían que escoltarlos y obligarlos a salir. Si eso sucediese dos, tres o cuatro veces, el presidente tendría que tomar el teléfono y habría amenazas de represalia", dijo Shawn Henry, un ex asistente del director del FBI.

"Esto está sucediendo miles de veces al día. Tiene que haber alguna definición de dónde está el límite y cuáles serían las repercusiones", agregó.

Henry, presidente de la firma de seguridad CrowdStrike, opinó que en lugar de pedirle a las empresas que aumenten su seguridad cibernética, el gobierno de Estados Unidos debe concentrarse más en cómo disuadir a los piratas informáticos y las naciones que los respaldan.

James Lewis, un experto en ciberseguridad en el Centro para Estudios Estratégicos e Internacionales, dijo que en el último año la Casa Blanca ha estado analizando cómo responderle seriamente a China.

"Este será el año en que ellos presionarán más, incluso pese a reconocer que será difícil que los chinos cambien. No hay un interruptor de encendido-apagado", dijo Lewis.

Al negar su participación en los ciberataques registrados por Mandiant, el ministerio de Relaciones Exteriores de China dijo que el país asiático también ha sido víctima de piratas informáticos, algunos de los cuales han sido rastreados y localizados en Estados Unidos.

El portavoz de la cancillería china, Hong Lei, citó un informe de un organismo dependiente del Ministerio de Tecnologías de la Información e Industria que dijo que solo en 2012 los hackers extranjeros utilizaron virus y otro software malicioso para tomar el control de unos 1.400 computadores y 38.000 cibersitios en China.

Lei puso en duda el informe el martes, diciendo que no creía que la evidencia apoyara un análisis real. Afirmó que China cumple estrictamente sus leyes contra los ciberataques.

Los expertos de seguridad cibernética dicen que las autoridades estadounidenses no llevan a cabo ataques similares ni roban datos de las empresas chinas, pero reconocen que los servicios de espionaje norteamericanos espían a otros países rutinariamente.

China es claramente un objetivo de interés, dijo Lewis, al subrayar que a Estados Unidos le interesaría recolectar información sobre las políticas militares de Beijing, como posibles planes contra Taiwán o Japón.

En su informe, Mandiant dijo que rastreó los ataques hasta un vecindario en las afueras de Shanghái donde hay un edificio de 12 pisos dirigido por la "Unidad 61398" del ejército chino.

Mandiant dijo que sólo hay dos conclusiones viables sobre la participación de los militares chinos en los ciberataques: o la Unidad 61398 es la responsable de los ataques persistentes, o éstos son realizados por una organización secreta de chinos con acceso directo a la infraestructura de telecomunicaciones de Shanghái, quienes impulsan una campaña de espionaje de varios años justo frente a las puertas de la unidad militar.

"En un estado que controla rigurosamente el uso de Internet, es muy poco probable que el gobierno chino no sepa de un grupo de atacantes que opera desde la Nueva Área de Pudong de Shanghái", dijo el informe. Mandiant concluye que la única manera en la que el grupo puede funcionar es con el "pleno conocimiento y cooperación" del gobierno de Beijing.

La unidad "ha robado sistemáticamente cientos de terabytes de información de por lo menos 141 organizaciones", escribió Mandiant.

Un terabyte es lo mismo que 1.000 gigabytes. La versión más popular del nuevo iPhone 5, por ejemplo, tiene 16 gigabytes de espacio, mientras que el iPad más caro tiene 64 gigabytes de memoria.

El archivo en Twitter de la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos entre 2006 y 2010 es de unos 170.000 millones de tuits, que representan 133,2 terabytes.

FUENTE: Agencia AP