Desde que abrazara con todas sus fuerzas el veganismo hace cerca de un año por recomendación de su pareja Lauren Silverman, el día a día del productor musical Simon Cowell y su familia no ha vuelto a ser el mismo, y tales cambios no podrían haber resultado más positivos para su dinámica doméstica.
Y es que, como ha revelado el también juez televisivo en su última entrevista, sus niveles de energía, vitalidad e incluso de ánimo se han disparado notablemente a lo largo de todo este período, lo que en consecuencia le ha llevado a afrontar con mayor optimismo y determinación aquellos retos que se desprenden de su vida más cotidiana.
"Mi memoria funciona mejor, tengo más energía y estoy de mejor humor. Y ahora soy plenamente consciente de que este es el estilo de vida que debería haber seguido hace muchos años para no acabar sobrepasado por todo. Recomiendo la dieta vegana a todo el mundo, sobre todo a aquellos padres con niños pequeños", ha asegurado.
Entre los citado desafíos destacan, por supuesto, las responsabilidades derivadas de su condición de padre del adorable Eric, quien a sus cinco años ya ha demostrado haber heredado de su progenitor esa curiosidad e hiperactividad innata que tanto le caracteriza.
En ese sentido, Simon ha asegurado que el veganismo le ha convertido en un padre mejor, esto es, más capacitado para lidiar eficientemente con todas esas labores ligadas a la crianza de su retoño. "Es un niño muy enérgico y yo tengo que adaptarme a sus ritmos para poder satisfacer sus necesidades. Por eso empecé a cuidarme más, quise probar el veganismo y he acabado integrándolo a mi vida", ha apuntado a su paso por un evento del canal británico ITV.