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Militares que rescataron a Ingrid también fueron estafados

BOGOTA (AFP). Miembros de inteligencia del Ejército colombiano que participaron en el rescate de Ingrid Betancourt, tres estadounidenses y otros once rehenes de las FARC, en julio pasado, se hallan entre los estafados por una captadora ilegal de dinero, reveló hoy martes la prensa local.

"Según los reportes que maneja la cúpula militar, entre los 'tumbados' (estafados) por el espejismo de intereses multimillonarios están algunos de los hombres de inteligencia que intervieron en la acción más exitosa contra las FARC: la Operación Jaque", señaló el capitalino diario El Tiempo.

Citando altas fuentes castrenses, el periódico señaló que por orden directa del presidente colombiano, Alvaro Uribe, se realizó una investigación interna que arroja hasta el momento que la cifra de militares que invirtieron dinero en estas llamadas 'pirámides' son más de 2,000.

"En el grupo de afectados aparecen varios de los nombres de los que trajeron de vuelta a la libertad a la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt y a otros 14 de los secuestrados por las FARC", precisó el reporte periodístico.

Según El Tiempo, el monto de la plata que invirtieron los militares no está determinado, "pero se sabe de oficiales que retiraron cesantías y que hipotecaron propiedades para invertir en esa pirámide, que quebró hace dos meses y que dejó al menos un millar de personas estafadas en Bogotá".

Hoy martes, continuaba en el municipio de Orito, en el sureño departamento de Putumayo, un paro cívico que paralizó el comercio y el transporte público de quienes resultaron estafados tras el cierre de la comercializadora DMG, que según el gobierno captaba dinero producto del narcotráfico.

Las 'pirámides financieras' son empresas ilegales captadoras de dinero que ofrecen rendimientos de hasta 300% a sus clientes mediante la captación de nuevos clientes.

Bogotá rescató el 2 de julio a Betancourt, los tres estadounidenses y once policías y militares colombianos a través de la Operación Jaque, pese a que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) señalaron que ésta fue el resultado de una traición de los rebeldes que custodiaban a los rehenes.