SAN BENITO (AFP). Los sicarios que asesinaron y decapitaron a 27 personas en una finca del norte de Guatemala son miembros del cartel mexicano 'Los Zetas' y buscaban al dueño del predio con intención de matarlo, dijeron este lunes las autoridades.
"Siento malestar e indignación por lo ocurrido. Es un evento macabro, es un evento salvaje", declaró este lunes el presidente Alvaro Colom, durante una visita a la zona de la masacre, agregando que mantendrá "por tiempo indefinido" la vigilancia conjunta de la Policía y el Ejército en esa región.
La matanza, que conmovió al país a pesar de estar habituado a la violencia, fue atribuida por el gobierno a 'Los Zetas', que operan en la impunidad en esa zona selvática del norte de Guatemala, próxima a la frontera mexicana.
Los sicarios ejecutaban a los trabajadores mientras les preguntaban donde estaba el dueño de la finca, Otto Salguero, quien comenzó a ser investigado luego de la matanza, perpetrada la noche del sábado al domingo, por sospechas de que está vinculado con el narcotráfico.
"Creemos que al señor Otto Salguero es a quien están buscando 'Los Zetas'. Él está ahora bajo investigación", dijo el ministro del Interior, Carlos Menocal, agregando que las autoridades intentan ubicarlo.
Además de la matanza, 'Los Zetas' mataron a otras cuatro personas en los últimos días, entre ellas a una sobrina de Salguero, cuyo marido había sido secuestrado por la banda y también fue asesinado.
Los cuerpos decapitados, entre ellos los de dos mujeres, fueron hallados el domingo en la finca 'Los Cocos', departamento de Petén, 600 km al norte de la capital, a donde fueron enviados equipos de investigadores y una unidad de las Fuerzas Especiales de Policía.
"Me estaba bañando cuando a la gente le dijeron que no se movieran y comenzaron a dispararles (...). Los comenzaron a matar a eso de las siete de la noche del sábado y terminaron como a las tres de la mañana" del domingo, relató a la AFP un sobreviviente que evitó revelar su nombre por temor.
"Estoy vivo gracias a Dios. Me hice el muerto cuando me metieron un cuchillo en el estómago, luego me fui a esconder y salí a eso de las cinco de la mañana y me encontré con un 'cabezal' (un montón de cabezas de víctimas) tirado", agregó el sobreviviente, quien estaba internado este lunes en un hospital.
El sobreviviente caminó sangrando varios kilómetros en busca de ayuda por una carretera solitaria, hasta que encontró a una persona que lo trasladó a un centro asistencial.
Hasta el mediodía del lunes, los médicos forenses habían identificado a 15 de las 27 víctimas, entre ellas dos mujeres y cuatro adolescentes.
Este lunes se registraron al menos tres ataques con granadas, en uno de los cuales resultó herido un policía, en Petén, uno de los departamentos más inseguros del país. Los blancos fueron un cuartel policial, un autopatrullas y una casa (en ésta resultaron heridos dos perros).
Aunque Guatemala tiene una de las mayores tasas de homicidios de América Latina, las decapitaciones no eran habituales en el país, a diferencia regiones de México, a pesar de que se habían registrado algunos casos el año pasado.
Los Zetas, cuyas redes se extienden del sur de Estados Unidos a Centroamérica, es un grupo creado por militares mexicanos que desertaron hace unos años para unirse al cartel del Golfo, al que ahora se enfrentan. Para financiar esa disputa recurren al secuestro de migrantes y otros delitos.
El cartel opera activamente en el norte de Guatemala, en los departamentos de Petén y Alta Verapaz.
Esta es la matanza con mayor número de víctimas registrada en los últimos años en Guatemala, que tiene uno de los mayores índices de homicidios en América Latina, un promedio de 18 al día. Los crímenes son atribuidos principalmente a las bandas de narcos y a las temidas pandillas o 'maras'.