Beijing dijo el jueves que tiene derecho a vigilar el espacio aéreo y mares que rodean a las islas artificiales que ha creado en aguas en disputa en el sur de China después de un incidente donde la armada del país asiático obligara a alejarse a un avión de vigilancia de Estados Unidos.
China difundió su postura después de que su fuerza aérea anunciara sus más recientes maniobras marítimas de adiestramiento en el Pacífico occidental como parte de sus acciones tendentes a mejorar su preparación bélica.
Un portavoz de la fuerza aérea china dijo que esos ejercicios siguen a maniobras marítimas efectuadas el mes pasado y posiblemente se programen otras similares en el futuro.
En su conferencia de prensa diaria, el portavoz del Ministerio del Exterior, Hong Lei, insistió en la soberanía indiscutible de China sobre las islas que ha creado mediante la acumulación de arena en la parte alta de atolones y arrecifes.
Aunque dijo que carecía de información sobre el presunto incidente, Hong señaló que China tiene "el derecho de vigilar el espacio aéreo y zonas de mar para preservar la seguridad nacional y evitar accidentes marítimos.
"Confiamos en que los países importantes respeten la soberanía de China en el mar meridional del país, que cejen de sus acciones que puedan intensificar las controversias y tengan un papel constructivo en la paz y la estabilidad regionales", declaró Hong.
Un equipo noticioso de la cadena CNN reportó un incidente donde la persona encargada de ordenar la salida de naves de la armada china exigió en ocho ocasiones a un avión Poseidon P8-A de la marina de Estados Unidos que se retirara cuando volaba sobre el arrecife Fiery Cross, conde China ha efectuado intensos trabajos para ampliar las islas que ha creado en el mar.