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Legisladores opositores interrumpen asamblea en Hong Kong

La jefa de gobierno de Hong Kong, Carrie Lam, volvió a verse expulsada de la cámara legislativa debido a protestas de la oposición, tras el violento ataque a un líder del movimiento de protestas iniciado hace casi cinco meses.

Legisladores prodemocracia gritaron y ondearon carteles que mostraban a Lam con las manos manchadas de sangre, lo que llevó a que los guardas de seguridad la escoltaran fuera de la sala y la sesión del jueves quedara suspendida.

El día anterior, las protestas impidieron a Lam ofrecer su discurso anual en la cámara. Lo difundió más tarde por televisión.

Los incidentes en el Consejo Legislativo y el ataque del miércoles por la noche a Jimmy Sham por parte de agresores armados con martillos y cuchillos daban un nuevo giro dramático en las protestas que sacuden la ciudad desde junio. Manifestantes y policía han mostrado niveles de violencia inéditos en el territorio desde que Gran Bretaña devolvió la excolonia al gobierno chino en 1997.

Antes de marcharse, Lam reiteró que su “máxima prioridad” era poner fin a la violencia, que ha afectado a la economía local y a la reputación de Hong Kong como un centro financiero de negocios seguro y donde se cumple la ley, con un sistema judicial sofisticado e independiente.

Lam dijo estar trabajando con los 180.000 funcionarios públicos y responsables de transportes para reinstaurar el orden, aunque la tarea se ha visto complicada por las simpatías de la ciudadanía con la causa de los “alborotadores”, como describió a los manifestantes más activos.

Sin embargo, se vio obligada a abandonar la sala entre peticiones de que renunciara. La legisladora prodemocracia Claudia Mo exclamó “Carrie Lam, es usted una mentirosa”.

Las protestas comenzaron en respuesta a una ley de extradición ya retirada que habría permitido enviar a sospechosos de delitos a China para ser juzgados en tribunales controlados por el gobernante Partido Comunista.

El movimiento se expandió después para incluir reclamaciones más amplias de sufragio universal, una investigación independiente sobre los métodos empleados por la policía contra los manifestantes, y otras demandas como que se deje de describir a los manifestantes como “alborotadores”.

Sham ha sido uno de los rostros del movimiento de protesta, como líder del Frente Civil de Derechos Humanos, que ha organizado grandes marchas. Sham se dirigía a una reunión por la noche en el distrito de Kowloon cuando cuatro o cinco agresores le asaltaron, dejándole consciente pero con heridas abiertas en la cabeza, según la página de Facebook del frente.

Mo y otros legisladores sugirieron el jueves que el ataque a Sham podría estar diseñado para asustar a otros y disuadirles de manifestarse, o incluso para dar un pretexto al gobierno para suspender las elecciones a concejales de distrito previstas para el mes que viene.

Sham pasó la noche en el hospital, y se creía que las lesiones que sufrió en la cabeza y el brazo no ponían en riesgo su vida, según la cadena estatal RTHK.

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