El cohete chino que orbita la Tierra fuera de control desde hace varios días colisionará con la atmósfera terrestre en las próximas horas, momento en el que previsiblemente se desintegrará casi en su totalidad, aunque no se descarta que algunos restos puedan caer en algún lugar poblado de la Tierra. Puede serguir el trayecto del cohete chino en vivo desde Telemetro.com
"De momento, no tenemos planes de derribar el cohete. Esperamos que impacte en un lugar en el que no dañe a nadie, como el océano u otro sitio similar", apuntó el jefe del Pentágono en rueda de prensa.
Cómo es el cohete chino fuera de control Larga Marcha 5: ¿dónde y cuándo caerá?
El cohete chino Larga Marcha 5 mantiene en vilo al mundo desde hace unos días. Pero, ¿qué sabemos de este cohete? El 29 de abril despegó este aparato del que China ha perdido el control. Este módulo (2021-035B) tiene unas dimensiones de 21 toneladas y 30 metros de largo (un edificio de 10 pisos).
Ahora mismo, vaga descontroladamente y se intenta rastrear para determinar dónde y cuándo caerá, algo complicado ya que da vueltas alrededor del planeta en una órbita entre los 164 y los 320 kilómetros de altura, a un ritmo de una vuelta cada 90 minutos.
Se espera que entre este sábado y el lunes caiga sobre la Tierra lo que podría ser el mayor desecho espacial de las últimas décadas, concretamente desde los 90.
¿Dónde caerá el cohete chino?
Esa es la pregunta que se hacen los científicos luego de conocer que el aparato está fuera de control y listo para regresar a la atmósfera de la Tierra.
China lanzó el primer módulo para su estación espacial Tiangong que se puso en órbita con éxito el 29 de abril. Pero el cohete que lo llevó allí está ahora en órbita fallida y podría -según estimaciones de expertos- hacer un reingreso descontrolado de regreso a la Tierra para aterrizar en un lugar desconocido. El riesgo de causar daño en la Tierra, según China y varios expertos, es mínimo, aunque no nulo. El cohete perdiendo gradualmente altitud y el punto de impacto de su caída sigue siendo difícil de prever por el momento.
De acuerdo al astrofísico Jonathan McDowell, del Centro Astrofísico de la Universidad de Harvard, dijo al medio estadounidense CNN que señalar hacia dónde podrían dirigirse los escombros “es casi imposible en este punto debido a la velocidad a la que viaja el cohete”.