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Gobierno e Iglesia chocan en Francia por el secreto de confesión tras informe de abusos

Un informe cifró en 330,000 los menores agredidos desde 1950 por clérigos o laicos trabajando en instituciones religiosas en Francia.

¿El secreto de confesión está por encima de la ley? Así lo entiende el jefe de los obispos de Francia, a quien el gobierno convocó este jueves para pedir explicaciones, días después de un demoledor informe sobre abusos a menores en la Iglesia.

El martes, la Comisión Independiente sobre los Abusos Sexuales en la Iglesia (Ciase) cifró en 330,000 los menores agredidos desde 1950 por clérigos o laicos trabajando en instituciones religiosas en Francia.

El alcance de estas agresiones conmocionó al país y el presidente de la Conferencia Episcopal (CEF), monseñor Éric de Moulins-Beaufort, pidió incluso "perdón" a las víctimas y se comprometió a actuar.

Sin embargo, un día después, sus declaraciones a la emisora pública France Info, reiterando una conocida línea roja del papa Francisco, causaron estupor, obligando al gobierno a tomar cartas en el asunto.

"El secreto de confesión se impone a nosotros y es más fuerte que las leyes", dijo el también arzobispo de Reims, respecto a una de las 45 propuestas de la Ciase para evitar nuevos abusos sexuales.

La respuesta del gobierno llegó este jueves. "Nada hay más fuerte que las leyes", dijo su portavoz Gabriel Attal tras una reunión, precisando que el presidente Emmanuel Macron pidió que se convocara al arzobispo.

El ministro del Interior, Gérald Darmanin, "recibirá a principios de la próxima semana a monseñor De Moulins-Beaufort para pedirle explicaciones", indicó a la AFP una fuente cercana al funcionario.

El líder católico indicó en una nota que aceptó la "invitación" a la reunión, que tendrá lugar el martes y que le permitirá exponer que el secreto de confesión "no se opone al derecho penal francés".

Aunque el gobierno francés considera la confesión un secreto profesional, protegido por ley, estima que hay excepciones: no se aplica a las confidencias fuera del confesionario ni a agresiones a menores de 15 años.

- ¿Un secreto "absoluto"? -

El tema del secreto de la confesión, uno de los siete sacramentos que los fieles católicos pueden recibir a lo largo de su vida junto al bautismo o el matrimonio, ya ha estado en el ojo del huracán en los casos de abusos.

En 2019, la Iglesia chilena, blanco de denuncias por abusos a menores, rechazó una ley debatida en ese país que la obligaba a romper el secreto, asegurando que es "un acto sagrado" de reconciliación "con Dios".

En la práctica, un cura al que un fiel le confiesa un delito grave en el confesionario, no puede informar a la policía, ya que el secreto es "absoluto" en virtud del derecho canónico, según el arzobispo francés.

"Una información de 'delictum gravius' que se haya conocido en una confesión se encuentra bajo el secreto sacramental más estricto", reza un manual de 2020 del Vaticano para gestionar estos casos.

Pero, en su informe, encargado por la CEF y la Conferencia de Religiosas y Religiosas de Francia (Corref), la Ciase recomendó a la Iglesia que deje claro que la confesión no cubre estos delitos, que deben denunciarse.

Tras sus polémicas declaraciones, el jefe de los obispos se justificó en un primer comunicado el miércoles por la noche, asegurando que el secreto permite que se confíen tanto víctimas como agresores.

"¿[Las víctimas] se confiarían si piensan que no permanecerá secreto? No les robemos esta posibilidad", aseguró De Moulins-Beaufort, quien subrayó no obstante que se esforzaba en buscar una alternativa.

En la nota del jueves, el prelado sugirió que la confesión puede servir para animar a la víctima a denunciar y recordó que Francia, un Estado oficialmente laico, "siempre respetó el secreto de confesión".

FUENTE: AFP

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