Un grupo de cubanos asilados en Panamá que se mantienen en huelga de hambre y algunos tienen sus bocas cosida como protesta frente a la Cancillería panameña, en el corregimiento de San Felipe. Advierten que se “cortarán las venas”, si el Gobierno no les concede la residencia en el panameña o que los envíen a un tercer país.
Los denunciantes aseguran que cuando se les concedió el asilo el gobierno panameño les prometió que iban a tener documentos legales con los que podrían encontrar un trabajo, tener una casa y traer a sus familias. Sin embargo, según ellos, hasta el momento el Estado no ha determinado qué hacer con ellos y no tienen empleos.
Los nueve que llegaron asilados a Panamá el 5 de septiembre pasado, tras haber sido detenidos en Bahamas, país en el que aseguran haber sufrido maltratos.
Por su parte, el secretario de Comunicación del Estado, Luis Eduardo Camacho, a través de su cuenta de Twitter, escribió: "Tiene asilo, permiso de trabajo y se les arregló encuentro con familiares. Me gustaría saber ¿Qué protestan?"
"Salvados de torturas en cárceles, de que fueran deportados, les dimos asilo, permisos laborales y oportunidad de encontrase con familiares", agregó.
FUENTE: Odalis Núñez