La primera reunión para iniciar la transición a la segunda fase de la mesa única de diálogo culminó sin avances. La discusión se estancó en la ausencia del sector privado.
Los representantes del Ejecutivo sostuvieron que no se puede analizar la metodología de la segunda fase del diálogo sin la representación de los empresarios, tal como fue acordado y solicitaron a la Iglesia Católica realizar los esfuerzos para convocar a todas las partes a la mesa.
Por su parte, algunos representantes de las agrupaciones sociales manifestaron que el sector empresarial fue invitado a la mesa a solicitud de ellos, y que el diálogo puede avanzar con los sectores que quieran participar.
Tampoco lograron acuerdos respecto al facilitador de esta fase. Maribel Jaén, representante de la Iglesia Católica, recordó que luego de que se decida el facilitador pasarán a ser observadores.
Jaen dijo que consultaron a Naciones Unidas la posibilidad de ser facilitadores de la fase 2, sin embargo, indicaron que solo podían brindar apoyo técnico para desarrollar la metodología.
La Iglesia Católica sugirió a las agrupaciones y al Ejecutivo revisar qué grupos del sector empresarial están dispuestos a participar, "para no perder el tiempo cada alianza y el Ejecutivo revisando el listado, traigan propuestas claras de qué sectores podemos invitar, de tal forma que traigamos propuestas claras, sean evaluadas entre ustedes, aprobadas entre ustedes y podamos pasar rápidamente a lo del facilitador"
Entre los puntos que se esperan sean abordados en esta fase están los disensos de la etapa anterior del diálogo.