Miguel Batista Guerra, miembro del partido Panameñista, denunció este domingo supuestos vínculos del partido oficialista Cambio Democrático (CD) con el colombiano David Murcia Guzmán, expropietario de la comercializadora DMG, quien se encuentra preso en Estados Unidos, cumpliendo una condena de nueve años de cárcel por lavado de dinero y en Panamá fue sobreseído por blanqueo de capitales.
Batista, acompañado de otros copartidarios, mostró unos cheques cuyos montos presuntamente, fueron acreditados un año antes (2008) que el partido gobernante ganara las elecciones, provenientes de al menos siete compañías propiedad de Murcia.
Entre las cifras plasmadas en los cheques revelados están: 20 mil dólares dirigidos a la empresa Ricamar, 121 mil dólares al partido Cambio Democrático (CD), 145 al CD y 18 mil dólares al actual ministro de Comercio e Industrias, Ricardo Quijano.
Los panameñistas prefirieron no revelar la fuente que les proporcionó la información divulgada.