En año de elecciones, todo el mundo queda con los ánimos caldeados. Algunas personas decepcionadas, otras muy felices, otras molestas. Es normal. Y todo este movimiento tiene un lado bueno: las tasas de suicidio disminuyen en esa época.
¿Quien descubrió eso? Fue un grupo de científicos americanos. Ellos analizaron los registros de los suicidios que ocurrieron durante las elecciones presidenciales de Estados Unidos entre los años 1981 y 2005 y encontraron que, en los estados donde la mayoría de los votantes apoyaron al candidato ganador, las tasas de suicidio disminuyeron. Parece lógico, ¿no? Si su candidato ganó, por supuesto, usted se sentirá más feliz.
Sin embargo, otro increíble dato llamó la atención: las tasas de suicidio también disminuyeron en los estados donde la mayoría de los votantes apoyaron el candidato perdedor. Los índices muestran una disminución del 4,6% en la tasa de suicidios entre los hombres y 5,3% entre las mujeres.
Los científicos responsables por la investigación creen que eso ocurre por culpa del poder de cohesión social. Ese sentimiento o sensación de apoyo social ayuda a dejar las personas más felices y a prevenir la depresión y los pensamientos suicidas.
FUENTE: Raquel Bellini