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Escándalo pone en duda caso contra estadounidense

LA PAZ, Bolivia (AP). La captura de una red mafiosa de altos funcionarios con posibles nexos en la justicia que extorsionaba a procesados, ha puesto en entredicho la investigación judicial en contra de un empresario estadounidense que lleva 18 meses detenido sin acusación formal por sospechas de lavado de dinero.

Es el segundo escándalo mayúsculo de corrupción que sacude al Ministerio de Gobierno durante la presidencia de Evo Morales. En febrero de 2011, la DEA detuvo en Panamá al general René Sanabria, director de una unidad antidroga de ese ministerio, por exportar 144 kilos de cocaína a Estados Unidos.

La detención, el martes, del director jurídico Fernando Rivera y otras 7 personas ha sacado a luz una red de funcionarios que exigía 50.000 dólares al estadounidense Jacob Ostreicher a cambio de favorecerle con la libertad y que, además, vendió ilegalmente 18 toneladas de arroz, maquinaria agrícola y ganado decomisados al investigado, dijo el miércoles el ministro de Gobierno, Carlos Romero.

Romero reveló a radio Erbol que el grupo, tras verse acorralado, ofreció "indulto presidencial" a Ostreicher para impedir que éste los acusara.

El empresario neoyorquino de 54 años llegó a Bolivia en 2008 para formar una sociedad e invertir en agricultura y ganadería en la región agroindustrial de Santa Cruz, pero se asoció con una colombiana que compró tierras de un narcotraficante brasileño extraditado a su país en 2010.

Ostreicher es investigado por lavado de dinero del narcotráfico. El sostiene que ha sido estafado por su socia y que los capitales que invirtió son limpios. Lleva 18 meses en un penal de Santa Cruz, 540 kilómetros al este de La Paz, sin que la fiscalía haya presentado hasta ahora una acusación formal. Sólo presentó una imputación preliminar. Desde hace una semana se encuentra en una clínica con síntomas del mal de párkinson y estrés acumulado.

El viceministro de Gobierno, Jorge Pérez, dijo el miércoles que Rivera y su grupo amenazaba con juicios y destituciones a fiscales y jueces si aceptaban el pedido de libertad que gestiona infructuosamente Ostreicher. En más de 20 ocasiones sus audiencias fueron suspendidas.

El juez Zenón Rodríguez le otorgó la libertad, pero a los seis días revocó su decisión alegando que no había valorado bien las pruebas. Ahora es investigado, dijo Romero.

Entre los detenidos está José Manuel Antezana, alto funcionario del Ministerio de la Presidencia, a quien se encontró 9.900 dólares, supuestamente parte de la venta ilegal de arroz.

Rivera también impulsaba otros juicios en los que el gobierno es querellante, entre ellos uno que tiene que ver con una supuesta banda terrorista acusada de tramar el asesinato de Morales en 2008.

En declaraciones a la AP desde la clínica, Ostreicher nombró como "cabecilla" de la supuesta conspiración a Rivera. "Esto fue deliberado, premeditado y el plan era tomar todo de mi".

Esther Gorena, esposa de un ex oficial de policía procesado por tráfico de cocaína, dijo a la AP que tras enterarse de la detención, denunció a Rivera porque usaba un lujoso auto deportivo incautado a su familia.

Rivera, que ocupa el cargo casi desde el inicio de la gestión de Morales, no contestó a las llamadas de la AP.

"Lo consideraba un profesional sólido", justificó Romero.

Ostreicher denunció en varias ocasiones desde agosto que funcionarios vendieron ilegalmente el arroz que le decomisaron, pero nadie le escuchó. Dijo que no se atrevió a acusar por temor a represalias.

Diplomáticos de la Embajada de Estados Unidos intercedieron a su favor, incluso llego a Bolivia en junio el congresista estadounidense Chris Smith y más recientemente el actor Sean Penn.

Romero dijo que la investigación comenzó hace tres meses, pero que no avanzaba porque "la información se filtraba".

Finalmente "estoy empezando a ver la luz al final del túnel" declaró Ostreicher a la televisora Cadena A el martes por la noche. Un día antes dijo a la AP que temía por su vida si volvía al penal por temor a represalias de sus extorsionadores.

Su caso, estancado tanto tiempo, ha comenzado a moverse tras destaparse el escándalo. El fiscal a cargo Carlos Robles declaró escuetamente a la AP :"No hemos finalizado la etapa de investigación, estamos a la espera de un informe de Suiza".

El informe de la policía suiza avala la legalidad del dinero enviado por Andrés Zolty, socio de Ostreicher, y llegó en octubre pasado, según el abogado defensor Yimy Montaño.Rivera declaró antes de ser detenido que no llegó el informe. Montaño dijo que Rivera no reconocía ese documento.

"Me parece increíble que (Rivera) haya trabajado para el presidente Evo Morales. He conocido a personas en la cárcel que me han contado que les hacía lo mismo que me hizo a mí", dijo Ostreicher el miércoles desde su cama en un hospital de Santa Cruz don de es tratado de varios males que se agravaron por su encierro.

Hay más de 13.000 presos en las cárceles de Bolivia, de los cuales el 84% no tiene sentencia y están en detención preventiva procesados por un sistema judicial que Morales prometió cambiar.