EEUU Internacionales - 

Apelaciones retrasan ejecución de mexicano

HUNTSVILLE, Texas, EEUU (AP). La ejecución de un ciudadano mexicano en Texas está en suspenso mientras la Corte Suprema de Estados Unidos considera las apelaciones para salvarle la vida.

Edgar Tamayo, de 46 años, debía enfrentar la pena capital la tarde del miércoles por el homicidio de un oficial de policía de Houston hace 20 años.

Funcionarios de Texas se han opuesto a las apelaciones para detener la ejecución con inyección letal, a pesar de las súplicas y la presión diplomática del gobierno mexicano y del Departamento de Estado.

Los abogados de Tamayo y el gobierno mexicano han alegado que su caso no se desarrolló debidamente porque no le informaron, según indica un acuerdo internacional, que podía recibir asistencia jurídica de su país tras el arresto.

La asistencia legal garantizada bajo el acuerdo podría haber revelado evidencia para evitar la pena capital por homicidio o proporcionado evidencia para evitar su ejecución, según funcionarios mexicanos.

Los registros muestran que el consulado se enteró del caso hasta que el juicio estaba a punto de comenzar.

El secretario de Estado John Kerry había pedido al procurador general de Texas, Greg Abbott, que demorara la ejecución, diciendo que "podría afectar la manera como los ciudadanos norteamericanos son tratados en otros países". El Departamento de Estado repitió esa postura el miércoles.

Pero el despacho de Abbott y la fiscalía de distrito del Condado Harris se opusieron a posponer lo que sería la primera ejecución este año en el estado con mayor cantidad de reos ejecutados: Texas ejecutó a 16 personas en 2013.

El máximo tribunal consideraba al menos dos apelaciones. Una se enfocaba en el asunto consular. La otra estaba relacionada con si Tamayo era mentalmente capaz y elegible para la pena de muerte.

La orden de ejecución se mantiene en vigor hasta medianoche.

Los abogados de Tamayo recurrieron a la Corte Suprema después que la Corte Federal de Apelaciones del 5to Circuito consideró que una apelación según la cual Tamayo era mentalmente deficiente y por lo tanto no cumplía los criterios para ser ejecutado fue presentada demasiado tarde.

La Junta de Perdón y Libertad Condicional de Texas rechazó el martes el pedido de clemencia de Tamayo.

"No importa de dónde sea la persona", dijo Lucy Nashed, portavoz del gobernador Rick Perry. "El que cometa un crimen despreciable como éste en Texas, queda sujeto a nuestras leyes estatales, incluido un juicio justo con jurado, y la pena máxima".

Tamayo estaba en Estados Unidos sin autorización y tenía antecedentes penales en California, donde cumplió una pena de prisión por robo y recibió la libertad condicional, según registros de la prisión.

"Nadie alega que no mató a (el policía) Guy Gaddis", dijo Ray Hunt, presidente del Sindicato de Policías de Houston. "El disfrutó los mismos derechos que tenemos todos".

Por lo menos otros dos reos en circunstancias similares fueron ejecutados en Texas en años recientes.

Tamayo estaba entre más de 40 ciudadanos mexicanos condenados a muerte en Estados Unidos cuando la Corte Internacional de Justicia de La Haya, Holanda, falló en 2004 que no les habían informado debidamente de sus derechos consulares. La Corte Suprema indicó posteriormente que audiencias solicitadas por la Corte Internacional sobre los casos de esos reos sólo eran obligatorias si el Congreso emitía una ley al respecto.

"Desafortunadamente, esa ley nunca se aprobó", reconoció la Secretaría de Relaciones Exteriores de México.

FUENTE: MICHAEL GRACZYK (Associated Press)