Los negociadores de las conversaciones de paz para Ucrania acordaron el sábado crear una zona desmilitarizada que separe a los soldados del gobierno de los combatientes pro rusos, que detenga sus avances, y facilite el retiro de armas pesadas y de combatientes extranjeros con el fin de garantizar una tregua estable en el este del país.
El pacto —alcanzado por representantes de Ucrania, Rusia, la insurgencia respaldada por Moscú y la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa— representa un intento para consolidar el alto el fuego concertado el 5 de septiembre y que ha sido infringido frecuentemente por combates.
Según el memorando suscrito después de horas de conversaciones que se prolongaron hasta la noche, las partes en el conflicto deben mantenerse estrictamente donde se encontraban el viernes sin hacer ningún intento de avance.
Leonid Kuchma, un ex presidente ucraniano que representó al gobierno de Kiev en las conversaciones, dijo que los compromisos serán puestos en marcha antes de 24 horas.
Según las condiciones del acuerdo, concertado en la capital bielorrusa de Minsk, cada parte debe replegar su artillería de 100 milímetros (4 pulgadas) o más cuando menos 15 kilómetros (nueve millas), para que la zona desmilitarizada tenga un ancho de 30 kilómetros (19 millas).
Aquellos sistemas de artillería de más alcance deberán ser retirados aún más allá, para garantizar que no puedan alcanzar a la otra parte.
El acuerdo, asimismo, prohíbe específicamente los vuelos de aeronaves de combate sobre la zona de conflicto así como el establecimiento de nuevos campos minados.
El compromiso "debe ofrecer a la población la oportunidad de que se sienta segura", declaró Igor Plotnitskyi, líder de los separatistas en la región de Luhansk.
La insurgencia se encuentra cerca de las ciudades de Donetsk y Luhansk en el este de Ucrania y también a la mitad del trayecto hacia la ciudad de Mariupol, en la costa, al sur de ambas, pero no quedó claro en qué estado quedan las posiciones que ocupa afuera de esas ciudades.
Las fuerzas del gobierno ucraniano se encuentran en el aeropuerto de Donetsk, pero igualmente se desconoce la ubicación de sus líneas afuera de esa ciudad.
El memorando también prevé el retiro de "todas las unidades y armas provenientes del extranjero, así como de combatientes y mercenarios", una referencia diplomática a los rusos que combaten al lado de los rebeldes.
Ucrania y Occidente acusan a Rusia de apoyar la insurgencia en el este de Ucrania con armas y soldados. Moscú refuta esas afirmaciones y asegura que los rusos que combaten con la insurgencia son civiles.
Heidi Tagliavini, enviado de la OSCE en las conversaciones, dijo que inspectores del grupo serán desplegados en la zona desmilitarizada para vigilar la tregua.
El alto el fuego que se declaró el 5 de septiembre ha sido violado en varias ocasiones. El sábado, el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de Ucrania Volodymyr Polyoviy, dijo que unos 20 rebeldes murieron en enfrentamientos con las fuerzas ucranianas en las últimas 24 horas, así como un militar ucraniano.
FUENTE: AP