Al menos 34 migrantes de África subsahariana están desaparecidos después de que su embarcación naufragara el viernes frente a la costa de Túnez, este naufragio se convierte en la última de una serie de tragedias ocurridas este mes, informó un portavoz judicial tunecino.
Túnez, un país de 12 millones de habitantes situado en el norte de África, cuenta con unos 21.000 migrantes africanos.
La oenegé Alarm Phone, un grupo de voluntarios que gestiona una línea telefónica de emergencia para migrantes, alertó en la mañana que 40 personas estaban en peligro "en un barco tratando de escapar de Túnez".
Los pasajeros señalaron que "supuestos guardacostas tunecinos confiscaron su motor, pegaron a algunos de ellos y los abandonaron en el mar", según el grupo.
La tragedia de este viernes se suma a otras cuatro que tuvieron lugar durante el mes de marzo.
El miércoles, cinco migrantes subsaharianos se ahogaron y 28 desaparecieron tras el naufragio de su embarcación. El barco tenía 38 pasajeros, la mayoría de Costa de Marfil.
Discurso de odio hacia los migrantes
Saied acusó en febrero a los migrantes subsaharianos de ser responsables de la "violencia" y de los "crímenes" en el país, y de querer cambiar la demografía de Túnez.
Grupos de derechos humanos asimilaron sus declaraciones a un "discurso de odio racista" y desde entonces, los migrantes han denunciado multitudes de ataques racistas. Muchos de ellos perdieron además su trabajo y su vivienda, y acudieron a sus embajadas respectivas para ser trasladados a su país.
FUENTE: AFP