Luego que el Gobierno de Uruguay decretara emergencia hídrica para la zona de la Capital Montevideo y sus alrededores, debido a la prolongada sequía que ha afectado el suministro de agua potable desde el pasado mes de mayo del presente año 2023; ha provocado que el 60% de los habitantes que actualmente residen en la ciudad uruguaya consuman agua dulce combinada con agua salada.
Las declaraciones del Ministro de Ambiente se dan, luego que en una entrevista el secretario de Presidencia, Álvaro Delgado, declarara que el agua sigue siendo apta para consumo humano y para las otras situaciones esenciales de su uso, pese a que está excepcionada por el Ministerio de Salud Pública debido a sus niveles de sodio y cloro.
Por otro lado, el Ministro de Ambiente, Bouvier, se refirió a la calidad del agua potable como la medición de los elementos del recurso natural el cual no se cumplían para catalogarlas de esa manera. “Pero es bebible y consumible”, aclaró en su momento durante el mes de mayo, en una conferencia de prensa.
Agua salada para los Uruguayos
Actualmente, habitantes de la capital uruguaya han manifestado que el agua que llega a Montevideo y sus alrededores tiene un sabor salado producto del aumento de los niveles de cloruro y de sodio. Casi dos meses después de todas estas declaraciones, la situación agudiza cada vez más comprometida: las reservas de agua dulce se están agotando y no solo no será potable sino tampoco bebible.
En su momento el presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, explicó que el objetivo era "tener procesos jurídicos más rápidos y más sencillos" respecto a una obra que habilitará otra fuente de agua potable. Actualmente se pronunció sobre la obra asegurando que estará terminada en un par de semanas, como estaba previsto.
Mientras tanto, las reservas de agua de la capital están por debajo del 2%, cifra que duraría 7 días.