El gobierno de Donald Trump anunció el martes el cierre de la oficina de Estados Unidos para asuntos palestinos en Jerusalén, una medida que simboliza el apoyo de Washington a Israel.
En su primer mandato, Trump trasladó la embajada de Estados Unidos de Tel Aviv a Jerusalén, una gran victoria para Israel, que considera la ciudad en disputa como su capital eterna.
En ese movimiento, Trump cerró un consulado histórico en Jerusalén que había servido para el acercamiento diplomático de Estados Unidos a los palestinos.
El predecesor de Rubio, Antony Blinken, intentó reabrir el consulado, a la vez que mantenía la embajada en Jerusalén; pero Israel se opuso.
Estados Unidos, en su lugar, estableció una Oficina para Asuntos Palestinos, que estaba dentro de la embajada pero reportaba por separado a Washington.
El cierre de la oficina se produce mientras Israel libra una ofensiva en Gaza en respuesta al ataque de Hamas del 7 de octubre de 2023, con el gobierno de Benjamin Netanyahu oponiéndose ferozmente a cualquier movimiento hacia un Estado palestino.
Bruce minimizó la importancia del anuncio y señaló que es parte de racionalizar recursos en el Departamento de Estado, y asegurar que las oficinas sobre "los temas importantes estén todas trabajando juntas."
FUENTE: AFP