El gobernador del estado brasileño de Sao Paulo, Geraldo Alckmin, citado en los testimonios de los delatores de Odebrecht en el marco del caso Petrobras, pidió hoy separar los delitos de corrupción, que tienen ser "castigados", de la cuestión sobre la financiación de campañas.
"Una cosa es la corrupción, que tiene que ser castigada, y otra es la financiación de las campañas, que es necesario darles una vuelta y hacerlas más baratas, establecer un criterio", dijo Alckmin en entrevista a Efe durante un foro con empresarios celebrado este martes en Sao Paulo.
Exdirectivos del grupo Odebrecht afirmaron en declaraciones a la Justicia que Alckmin recibió unos 3,2 millones de dólares en pagos irregulares para sus campañas electorales de 2010 y 2014.
"No tengo ni jubilación, ni pensión del sector público, vivo de mi salario, no tengo ningún patrimonio, entonces, cero, cero, cero, ni un centavo ha sido ilícito", aseveró el gobernador del que es el estado más poblado e industrializado de Brasil.
Las acusaciones se recogen en el testimonio de al menos tres de los 77 exdirectivos de Odebrecht, cuyos testimonios han sacudido los cimientos de la democracia brasileña con casi un centenar de políticos aforados bajo investigación por presunta corrupción, entre ellos ocho ministros del Ejecutivo del presidente Michel Temer.
La implicación de Alckmin en el caso ha sido transferida al Supremo Tribunal de Justicia, órgano competente de juzgarlo y que tendrá que decidir ahora si autoriza o no abrir una investigación contra él.
Según los exdirectivos Benedicto Barbosa, Carlos Armando Guedes y Arnaldo Cumplido, Alckmin recibió dos millones de reales (unos 600.000 dólares) en la campaña de 2010 y 8,3 millones de reales (unos 2,6 millones de dólares) cuando fue reelegido en 2014, valores que en ambos casos no fueron declarados a la Justicia electoral.
"Rendiré cuentas, espero que se haga en profundidad y con rapidez, pero creo que necesitamos verificar el origen de ese problema. El problema es corrupción y necesita ser castigado. La otra es financiación de campañas", reiteró durante el encuentro en el que estuvo el presidente de la Agencia Efe, José Antonio Vera.
En este sentido, Alckmin precisó que el sistema político brasileño está "desgastado", y el país solo tiene hasta este septiembre para hacer una "reforma política" que articule, entre otros asuntos, campañas con un costo menor y un menor número de partidos.
"Tenemos uno de los sistemas políticos peores del mundo. ¿Cómo se puede funcionar con 35 partidos? Y luego tenemos problemas de financiación de las campañas", comentó.
Los relatos de los antiguos ejecutivos de Odebrecht revelan la financiación ilegal de campañas, "favores" en dinero para "retribuir" la obtención de obras públicas o la aprobación de leyes que favorecían los negocios de la empresa.
No obstante, Alckmin insistió en que "son dos cosas importantes: primero corrupción que es cárcel. El lugar del corrupto es la cárcel; el segundo, el modelo político".
El foro con ejecutivos de compañías españolas en Brasil, organizado en Sao Paulo por la Agencia Efe, fue apoyado por el banco Santander, Everis, Arteris, Acciona Infraestructuras y Elektro.
FUENTE: EFE