Luego de que di a luz, como era de esperarse subí de peso pero me pasó algo bien particular, no me podía arrodillar porque sentía un dolor inmenso, pasaron varios meses hasta que logré hacerlo; posteriormente y luego de dos años más o menos, mis rodillas comenzaron a hincharse, generándome dolor como si tuviera un aire muy adentro, pues tuve que ir al médico, quien me dijo que podría tratarse de bursitis.
Cualquiera de las bolsas de la rodilla puede inflamarse, pero la bursitis de rodilla ocurre con mayor frecuencia sobre la rótula o en la parte interior de la rodilla debajo de la articulación.
La bursitis de rodilla ocasiona dolor y puede restringir la movilidad. El tratamiento para la bursitis de rodilla a menudo implica una combinación de prácticas de cuidado personal y tratamientos administrados por el médico para aliviar el dolor y la inflamación.
Sin embargo; puede deberse a otras causas como:
- Lesiones que puedan generar que el líquido excedente de las articulaciones se acumule.
- Enfermedades y afecciones como: Artrosis, Artritis reumatoide, Infección, Gota, Seudogota, Quistes o Tumores.
Para prevenir la hinchazón en las rodillas debemos:
- Fortalecer los músculos que se encuentran alrededor de la rodilla.
- Elegir un ejercicio de bajo impacto.
- Mantener un peso saludable.