Al menos ocho personas, entre ellas tres niños de corta edad, murieron el viernes en un triple atentado con coches bombas en la ciudad oriental libia de Darna, considerada el bastión de la rama de grupo yihadista Estado Islámico en ese país.
En un comunicado difundido hoy por las milicias rebeldes "Consejo de Shura" y "Consejo Muyahidin", afines al gobierno cesante en Trípoli, la primera explosión se produjo en el barrio oriental de Shiha cuando dos miembros de la citada milicia inspeccionaban un vehículo dejado junto en una zona donde se concentraban sus fuerzas.
El segundo estalló en un puesto de control e iba conducido por un suicida y el tercero -también manejado por un kamikaze- estalló en el centro de la referida localidad y mató a dos milicianos del citado Consejo
En este tercer atentado murió, asimismo, el jefe del Consejo Local, Hosam Alnobar, dos niños de corta edad y un civil, mientras que otras diez personas resultaron heridas.
Darna, localidad próxima a la frontera con Egipto, es desde hace tres semanas escenario de duros combates entre milicias afines al gobierno en Trípoli, considerado rebelde, y la rama libia del EI, que trata de recuperar posiciones.
Fuertes de Seguridad en la vecina ciudad de Bengasi, la segunda en importancia del país, informaron de que al menos tres miembros de las fuerzas leales a Trípoli perecieron en combates con el Ejército fiel al Parlamento internacionalmente reconocido en Tobruk.
Los enfrentamientos se libraron en las proximidades del centro comercial Abu Hadamh y en los mismos murieron trece personas más, entre ellas soldados del general Jalifa Hafter, jefe del Ejército leal a Tobruk.
Esta última información no ha sido confirmada ni desmentida por las citadas fuerzas.
Los combates, que se suceden en la ciudad desde que en mayo de 2014 Hafter lanzara la denominada "operación Libertad" para arrebatar su control a las milicias de Trípoli, causó un nuevo éxodo de civiles, agregaron las fuentes.
El objetivo era debilitar a las fuerzas leales al gobierno no reconocido en Trípoli y reducir así su capacidad de negociación en el ahora fallido proceso de paz.
Ambas partes se volvieron a reunir esta semana en marruecos bajo el auspicio de la ONU, pero no se llegó al acuerdo definitivo sobre la formación de un gobierno de unidad nacional que permita abrir un frente contra el yihadismo y estabilizar el país.
Los negociadores de Trípoli regresaron a la capital con una nueva propuesta que probablemente sea discutida por el Parlamento cesante el próximo martes.




