El secretario de Estado, Mike Pompeo, y su par mexicano, Marcelo Ebrard, se reunieron este domingo en Ciudad de México, un día antes de que venza el plazo fijado por Washington para que su vecino del sur combata eficazmente la migración ilegal.
El representante del Partido Republicano en México, Larry Rubin, auguró ante la prensa una buena reunión previo al encuentro, "porque los resultados del gobierno mexicano han sido altamente positivos" en cuanto a la disminución del flujo de la migración ilegal hacia Estados Unidos.
A finales de mayo, el presidente estadounidense Donald Trump amenazó con imponer aranceles graduales de 5% a 25% a partir del 10 de junio a las exportaciones de México si no frenaba a los migrantes.
Pero el 7 de junio, ambos países acordaron suspender la aplicación de los aranceles: Estados Unidos le dio a México un plazo de 45 días para poner en marcha medidas contundentes.
Trump ha dado declaraciones favorables al respecto: "Quiero agradecer a México, porque realmente han ido más allá, creo que va más allá de lo que pensábamos. Nunca esperamos 21.000 soldados" mexicanos desplegados en la frontera norte y sur del país.
El número de indocumentados que llega a México para tratar de cruzar a Estados Unidos disminuyó en junio a 100.000 personas, en comparación con las 144.000 que ingresaron en mayo, según cifras de la cancillería mexicana.
La reunión con Ebrard fue la única actividad de Pompeo en México, quien se dirigía a El Salvador, donde se reunirá con el presidente Nayib Bukele, en el marco de una gira latinoamericana que incluyó escalas en Argentina y Ecuador.
FUENTE: AFP